219 - LOS DÍAS DE ELÉ
LOS DÍAS DE ELÉ
Los días de Elé eran días sin escuela
y de muchas obligaciones.
Por las mañanas: el corralón de los
cochinos, la pajarera, el patio, las botellas, algún que otro mandado; y a la
hora del almuerzo: poner, servir y quitar la mesa a los dueños.
Los mediodías: unas veces, por
antojarse la dueña de tallullos y majaretes, traer un saco de mazorcas tiernas
del maizal, pelarlas y rallárselas a Dengo en el rallador. Otras, si la hermana
del dueño quería malarrabia, ir a sacar boniatos y venir con ellos húmedos de
tierra, para lavarlos, pelarlos y picarlos en cuadritos. Y algunas, cuando
había dulce en almíbar, ir del boniatal al yucal por vianda fresca para que
Dengo hiciera buñuelos.
Los mediodías eran también para el
caballo del dueño: dos veces a la semana, baño con manguera y jabón especial
comprado en Pinar del Río; a diario, rasqueta de cabeza a rabo y cepillo por
todo el pelo, sin olvidar el envaselinado de la crin y la cola, que tenían que
estar siempre brillosas y suaves.
Además, si Dengo andaba de lavado o
planchado, Elé la ayudaba por los
mediodías en la limpieza de la casa. Y
eso para él era un gusto.
Antes del paseo de Calazán, Biembe y
Román traían del potrero las vacas y los terneros. Y después del paseo, el niño
ponía, servía y quitaba la mesa de los dueños.
Así eran los días de Elé: días de
muchas obligaciones. Para que el dueño lo dejara vivir con su abuelo en el
cuarto del maíz seco; para que el viejo tuviera su almuercito, su comida y
alguna ropa con que vestirse. Días sin escuela, en los que Dengo, de trajín en
trajín, le oía cantar bajito aquella canción que el niño había aprendido de
Calazán, y que era una canción muy vieja y muy triste:
Nos mandan que nos sentemos nos
tenemos que sentar.
Nos mandan que nos paremos, nos
tenemos que parar.
Tataé, Tataé, Tataé,
Carabalí
no sabe leer.
(Nersys Felipe, Román Elé. Ediciones de la Torre.)
(Tallullos: masa de maíz
tierno molido y envuelto en hojas de mazorca) (Majaretes: Especie de flan hecho
con coco y maíz)
1.- ¿Por qué los días de Elé eran sin
escuela? Porque eran
2.- ¿Por qué hacía realmente Elé toda
esa cantidad de trabajo? Para que
- Granjera | |
- Criada | |
- Jardinera | |
- Veterinaria |
4-. ¿Qué hacía Dengo en la casa?
5.-
Elé tiene unos diez u once años, como tú. ¿Crees que es justo que un
niño de esa edad trabaje tantísimo?
¿Por qué?
6.- ¿Cómo crees que se sentía Elé en
su día a día?
7.- ¿Qué harías tú si tu abuelo
estuviera en estas circunstancias?
8.- Haz una
relación de cosas que tenía que atender
Elé
9.-
Describe cómo imaginas que es la casa.