207 - LA TIERRA DE JAUJA
LA TIERRA DE JAUJA
Honzingera: Anda, anda, hermano Panarizo; no te
quedes rezagado, que ahora es tiempo de tender nuestras redes.
Panarizo: ¿Y cómo quieres que ande, hermano
Honzigera, si no puedo con mis huesos? Tres leguas llevamos dándole a los pies.
¡Ay, yo no aguanto más! Tengo tanta hambre que un pollo me comería con plumas y
todo.
Honzingera: Pues aguarda y podrás engullirte una
buena cena. A estas horas suele pasar por aquí un labrador, un tal Mendrugo,
con una cazuela de comida para su mujer, que está en la cárcel. Este Mendrugo
es bastante simple, y no nos será difícil, sin que él se dé cuenta, comernos lo
que lleva en la cazuela. Le contaremos aquel cuento de Jauja, ya sabes; y como
él estará embobado escuchándonos, nos embaularemos bonitamente algunos bocados,
por lo menos. Espera... Parece que se oyen pasos. ¡Sí, es él! Levántate y
estate preparado, que ahí llega nuestro hombre.
Mendrugo: ¡Diablos, esta mujer va a acabar
conmigo! Le da por empinar el codo más de la cuenta, luego arma una trifulca y
a la cárcel. Y después ¡hala!, Mendrugo que sude y que se afane para darle de
comer.
Honzingera: ¿Adónde vas, buen hombre?
Mendrugo: ¿Adónde voy a ir? A la cárcel, a
llevarle el pienso a la Tomasa.
Honzingera: ¡Vaya, vaya! ¿Y qué llevas en ese
recipiente?
Mendrugo: Ah, ¿esto? No es ningún recipiente; es
una cazuela. Llevo unas albóndigas para la Tomasa, que se pirra por ellas. Las
he hecho yo mismo, con carne de la mejor, huevos y especias, todo bien rebozado
con harina blanca.
Honzingera: ¿Y le llevas todos los días la comida a
la cárcel? ¡Pensar que te ahorrarías todos esos trabajos si vivieras en la
tierra de Jauja!
Mendrugo: Y eso ¿con qué se come?
Honzingera: ¡Cómo! ¿No sabes lo que es la tierra de
Jauja? Ven, siéntate un momento con nosotros y te describiremos todas sus
maravillas con pelos y señales.
(Se sienta entre Honzingera y Panarizo y se
dispone a escuchar, luego de poner la cazuela sobre las rodillas. Durante el
diálogo que sigue, Honzingera y Panarizo se las arreglarán, de la manera más
cómica posible, para irse engullendo las albóndigas de la cazuela, procurando
cada uno distraer a su víctima para dar tiempo a que el otro coma.)
Honzingera: Verás... Es un lugar en donde pagan a
los hombres por dormir.
Panarizo: Una tierra en donde azotan a los hombres
que se empeñan en trabajar
Mendrugo: ¡Qué me dice!
Panarizo: Como lo oyes.
Mendrugo: ¡Oh, qué buena tierra! Cuénteme las
maravillas de ese lugar.
Honzingera: En la tierra de Jauja hay un río de miel
y otro de leche, y entre río y río hay una fuente de mantequilla y requesones,
y caen en el río de la miel, que no parece sino que están diciendo: «cómeme,
cómeme».
Mendrugo: ¡Pardiez!, no hacía falta que me lo
dijeran a mí dos veces.
Panarizo: En la tierra de Jauja hay unos árboles
que son de tocino. Y las hojas son de pan fino, y los frutos de estos árboles
son de buñuelos, y caen en el río de la miel, y ellos mismos están diciendo:
«máscame, máscame».
Honzingera: En la tierra de Jauja las calles están
empedradas con yemas de huevo, y entre yema y yema, un pastel con lonjas de
tocino, de modo que ellas mismas están diciendo: «trágame, trágame».
Panarizo: En la tierra de Jauja hay unos asadores
de trescientos pasos de largo, con muchas gallinas, capones, perdices...
Mendrugo: ¡Huuum! ¡Con lo que a mí me gustan!
Honzingera: En la tierra de Jauja hay muchas cajas
de confituras: mazapanes, merengues, arroz con leche, natillas... Y hay unos
barriles de vino dulce junto a las confituras, y unas y otras están diciendo:
"cómeme, bébeme, cómeme, bébeme"; hay también muchas cazuelas con
huevos y queso.
Mendrugo: ¿Como esta que yo traigo? (Mira la
cazuela) ¡Anda, si está vacía! (Honzingera y Panarizo hacen mutis corriendo.
Mendrugo, dando voces tras ellos) ¡Ladrones! ¡Ladrones! (Se detiene de pronto y
mira la cazuela tristemente) Me han dejado sin un buñuelo. ¡Pobre de mí! ¿Y qué
hago yo ahora? (Pausa) Pobrecillos, a lo mejor es que tenían hambre...¡ Que
Dios les perdone el daño que me han hecho! La culpa la he tenido yo, por creer
que hay tierras en donde se puede vivir sin trabajar. Esto me servirá de
lección.
Lope de Rueda, La tierra de
Jauja (texto adaptado)
- sobrinos | |
- tíos | |
- hermanos | |
- padre e hijo |
a) vives
en la abundancia. | |
b) vives
en las nubes. | |
c) vives
en el país de la risa. | |
d) vives
en el país de la música. |
- adinerados. | |
- empobrecidos. | |
- endeudados. | |
- enchufados. |
4.- La abundancia,
para una persona, ¿supone su felicidad completa?
5.- ¿Consideras justo que una persona esté en la cárcel
por ser acusada de algo que no ha hecho?
6.- ¿Era correcta la estrategia que planearon Honzingera
y Panarizo para aprovecharse de Mendrugo?
7.- La mentira, ¿es un buen camino para alcanzar los
propósitos que alguien se propone?
8.- Empareja estas palabras de la lectura con sus
significados:
1 rezagado 2 leguas
3 engullir 4 embaular 5 trifulca
9.- Di
el nombre de cinco alimentos que abundaban en la tierra de Jauja.
10.- ¿Puede existir en realidad la tierra de Jauja? ¿Por
qué?