Los nobles tenían la función de gobernar sus grandes territorios. En ocasiones, los nobles tenían más terrenos que los propios reyes. Los nobles eran súbditos del rey y el noble a su vez tenía a sus vasallos que podía ser otro noble, caballeros y campesinos.
Los nobles también vivían en un castillo y eran iguales que los del rey.
Los nobles vestían igual que los reyes.