Las branquias y las aberturas branquiales están situadas detrás de la cabeza  y  protegidas mediante un opérculo.

Las branquias son los órganos respiratorios de los peces y están formadas por una serie de laminillas cubiertas por una fina piel irrigadas de sangre (a ello deben su color rojo intenso) . El agua de respiración aspirada a través de la boca, pasa por entre las laminillas branquiales, donde la sangre absorbe el oxígeno y descarga el anhídrido carbónico. Ciertos peces rápidos, como por ejemplo, la caballa, nadan con la boca entreabierta, produciendo así una corriente de agua continua a través de las branquias.   Estas branquias son conocidas como agallas .