Poema: Nunca tuve una planta de nomeolvides
de nomeolvides.
Por eso nunca recuerdo
lo que me pides.
Ato un nudo en mi dedo
pero es en vano.
En invierno me acuerdo
lo del verano.
Escribo en papelitos,
sí tu mensaje.
Pero cuando los leo
ya estás de viaje.
Regalame una planta
de nomeolvides,
tal vez así recuerde
lo que pides.
Claro, si la planta
no se me seca,
porque olvide echar agua
en su maceta.
Elsa Lira Gaiero
*Regálame (se respetó el original)
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