Miguel, Miguel, Miguel

Organización:

Los jugadores deben estar en número impar y se sitúan separados unos de otros mientras cantan y realizan las acciones que se dicen en la canción.

Juego:

Una vez separados por el terreno de juego todos los jugadores, comienzan todos a cantar y ha dar vueltas, siguiendo la letra de la canción. Cuando se acaba la canción, rápidamente deben formar parejas, cogiéndose de la mano y sentándose en el suelo. El jugador que queda libre es el jugador que ocupará el lugar del director del juego, que es quien canta la canción y da las órdenes del juego, al mismo tiempo que vigila si alguien se equivoca en la dirección de las vueltas o se adelanta a la acción. Si descubre a alguien que lo hace, éste jugador pasa a ser el director del juego.
No se podrán repetir las parejas, es decir, que siempre habrá que buscar a algún jugador con el que aún no se ha formado pareja.

Canción:    

Miguel, Miguel, Miguel
da vueltas al derecho.
Miguel, Miguel, Miguel
da vueltas al revés.
¡Una, dos y tres!