La madre se sitúa frente al resto de jugadores y comienza a hacer gestos, muecas, posturas, mímica y todo aquello que se le ocurra sin hablar ni gritar, pero debe ir cambiandolos cada vez más rápido.
El resto de jugadores deben imitar a la madre de tal forma que el primero que se equivoca en la imitación ocupa el puesto de la madre.
Pueden asignarse puntos al principio del juego (por ejemplo, 5 puntos para cada jugador) y el que se equivoca pierde un punto. Gana el juego el que sigue con puntos y el resto de jugadores no tienen ningun punto.