Los niños se colocan en fila y caminan siguiendo el ritmo que marca la
madre con el pandero o la pandereta: "un-dos, un-dos,..."
Cuando caminan, los niños levantan mucho los pies y moviendo los brazos
igual que si fueran soldados..
Si la madre deja de tocar el pandero, los niños se quedan como estatuas.
Estando inmóviles, si la madre da un golpe al pandero, se intercambian
su sombrero con el niño más cercano, si da dos golpes, dos pasos hacia delante
y si da tres golpes, volveremos al punto de partida intentando mantener
la fila.
Variaciones:
Se podrá variar la distancia entre los niños y la madre, adaptándola a la
edad de los jugadores. También se puede hacer el avance de espaldas a la madre,
o de lado.