Se trata de una variante del juego Antón Pirulero.
Organización:
Pueden participar tantos jugadores como se desee.
Uno de los jugadores deberá apartarse lo suficiente de los demás
como para no escuchar lo que se esté diciendo. Éstos, que
se habrán sentado en el suelo haciendo un círculo, elegirán
quién es el director de la orquesta.
Juego:
El director, al ritmo de una canción, irá haciendo gestos
como si tocara diferentes instrumentos de música, y los irá
cambiando constantemente.
El resto de los jugadores le imitarán y cambiarán de instrumento
musical cuando lo haga el director de orquesta, lo más rápidamente,
para dificultar la identificación de éste.
A una señal, el jugador que había sido separado del grupo
se coloca en el centro del círculo y deberá identificar quién
es el director de la orquesta.
Si lo hace, el que hacía de director de orquesta pasa a ser el
jugador separado del grupo, que deberá elegir un nuevo director de
orquesta.