Las sardinas

 

Organización:


Necesitaremos un espacio de juego amplio y llano. En los extremos del terreno de juego se trazan dos líneas que servirán de "casa" para las sardinas.Todo el espacio entre esas dos líneas es el mar.

Juego:

Se necesitan al menos diez jugadores. Se eligen a suertes los dos jugadores que hacen de pescadores y que se sitúan en el mar. El resto de jugadores hacen de sardinas y se colocan en uno de las casas. Cuando los pescadores dan la voz de: "¡a pescar, a pescar!", las sardinas deberán salir corriendo para intentar llegar hasta la otra casa evitando ser cogidas por los pescadores. Una vez que todas las sardinas que se han salvado se reúnan allí, los pescadores volverán a gritar la voz de salida y continuará el juego en sentido contrario. Se prosigue de esta forma hasta que todas las sardinas se hayan pescado.
Una regla que las sardinas deben cumplir es que una vez salgan de una orilla ya no pueden retornar a refugiarse en ese lado. Si retroceden hasta la orilla de salida, se quedan una mano( una carrera) sin jugar. Las dos primeras sardinas capturadas forman una barca dándose la mano. Su misión es interponerse en la trayectoria de las sardinas que corren y conseguir desviarlas para favorecer la pesca de los pescadores. Sin embargo, la barca no podrá capturar sardinas, sólo puede impedir su paso. Las dos siguientes sardinas,las cogidas en tercer y cuarto lugar, también se cogen de la mano y forman la red. Su función será pescar a todas las sardinas posibles, apresándolas en medio de ellas. Cuando la barca y la red están construidas, los pescadores se juntan formando un cadena con la barca y la red en medio y continúan pescando sin soltarse de la mano. Para facilitar su trabajo, con sólo tocar a las saridnas, éstas ya estarán apresadas. Las sardinas tocadas a partir de entonces se irán uniendo de forma alternativa, una a la barca y otra a la red.
Si las sardinas consiguen romper la red por detrás, los que la formaban se quedan sin jugar hasta la siguiente partida, y la barca deja de jugar hasta que los pescadores, jugando sueltos de nuevo, formen otra red. Si la que se rompe es la barca, ésta queda fuera del juego y los jugadores que forman de la red esperan a que se forme una nueva barca.
El final es variable, en función del número de jugadores. Cuando la barca y la red están formadas por cinco jugadores, los pescadores se juntan uno a cada una de ellas y finalizan la pesca cerrando los extremos de la cadena.