PROCEDIMIENTO
Ya tenemos los planetas y el Sol. Ahora tenemos que hacer sus órbitas. Cogemos el alambre y comenzamos a doblarlo haciendo una espiral similar a las órbitas y contaremos hasta nueve vueltas.
Ahora los colocaremos por orden de más lejano a más cercano al Sol: es decir, cogeremos Plutón y lo ensartaremos desde el interior en nuestra cadena de alambre en espiral y lo llevaremos con mucho cuidado desplazándolo hacia el exterior para que no se nos deshaga justo hasta la novena vuelta de la eclíptica. En la octava vuelta colocamos a Neptuno, en la séptima vuelta a Urano, en la sexta colocamos a Saturno, en la quinta a Júpiter, en la cuarta a Marte, en la tercera a la Tierra, en la segunda a Venus y en la primera a Mercurio, después de Mercurio metemos el Sol y lo llevamos hasta el extremo interior del alambre. Ya tenemos nuestro Sistema Solar. Lo podemos colgar de un hilo al techo y así estará como flotando en el espacio.