El Cid dirige a sus tropas una arenga a las puertas de Valencia y les anuncia que al día siguiente atacarán a los moros que los tienen cercados. Alvar Fáñez propone al Cid una estrategia: mientras el Cid combate de frente, él y sus hombres atacarán al enemigo por otro lado. Todo se hace según estaba previsto y el Cid sale victorioso, obteniendo fama y riquezas.