Este juego es conocido por La Huta en la zona norte de España y también se le llama Los Chaplones. Nosotros lo jugábamos con el nombre de La Lata. Lo describiré tal y como lo jugamos en nuestro taller, aprovechando materiales de reciclaje.
Organización:
Se coloca una lata de conservas o de cerveza de pie y colocamos un número igual de cromos o canicas para cada uno de los jugadores encima de la lata.
Se traza una línea a unos 4-5 metros de la lata. Cada jugador dispone de dos piedras (chaplones, en la zona Norte de España) para lanzar. Pueden servir también los tejos empleados en el juego de la rayuela.
Material:
Una lata de conservas, una lata de cerveza o de refrescos (una huta)
Cromos, canicas y todo aquello que se pueda apostar.
2 piedras, chaplones, tejos o en general dos objetos que podamos lanzar para volcar la lata.
Juego:
Se coloca la lata de pie y encima de ella, cada jugador coloca el mismo número de cromos, canicas, monedas (incluso tazos de los de ahora).
Luego todos los jugadores se colocan detrás de la línea, a unos 4-5 metros de la lata (cuando juegan las personas mayores, esta distancia se puede hacer mayor). A continuación y por turnos que se deciden a suertes, cada jugador lanza una piedra (o chaplón) para intentar volcar la lata. Si lo consigue, el jugador se lleva los cromos, canicas o monedas que estén más cerca de la piedra que de la lata. Si el jugador no se lleva todos los cromos o canicas, el siguiente jugador deberá tirar para dejar su piedra más cerca de los cromos que hay en el suelo que de la lata y con esto consigue llevarse los cromos. Así se repite el juego hasta que ya no queden cromos o canicas, momento en el que se coloca la lata de pie y se colocan encima más cromos.