Podemos utilizar las actividades en línea para introducir el tema de medida en clase, como elemento de motivación, para discutir sobre él o como instrumento de evaluación, para comprobar si han aprendido cosas sobre la medida en otras actividades de medida real.
Se encuentra haciendo clic en el asiento del balancín.
Medidas en el parque con pasos, palmos y pies. Diferencias entre las medidas que hacen diferentes personas. Mi palmo.
La actividad nos propone medir diferentes espacios del parque, de la manera que lo harían para jugar, sin utilizar instrumentos específicos. Es un tipo de medida que utilizan en sus juegos. Algunas veces medimos usando pasos, pies o palmos, en función de la longitud y de la disposición del elemento a medir.
Después de la actividad nos propone un problema para discutir: midiendo un camión de juguete, si lo mide el chico mayor mide 4 palmos, si lo mide ella mide 5 palmos y si lo mide el pequeño, seis palmos. Puede servirnos para abordar en el aula el tema de la inexactitud de las medidas corporales, y la diferencia que hay entre unos y otros.
Para finalizar, y como elemento motivador el chico puede medir el tamaño de su palmo apoyando su mano en la pantalla y haciendo crecer la mano del dibujo hasta su medida real.
Se accede a la actividad clicando delante del primer asiento.
Medimos diferentes objetos escolares usando la regla.
Actividad.
La mayor dificultad que tienen al hacer esta actividad en la realidad, sobre el papel, está en situar el cero. Muchas veces los chicos miden a partir del uno y la medida es errónea. La actividad puede ayudarnos a detectar el problema.
Una vez superada la pantalla se rompe la regla por el cero, y deben buscar una estrategia para medir de manera más indirecta: Algunos contarán los centímetros uno a uno, otros harán la diferencia entre el final y la medida inicial... es importante la puesta en común de estas y otras estrategias que puedan surgir.
En la tercera actividad a la regla le faltan números, y deben volver a modificar su estrategia para conseguir medir correctamente los objetos.
Se accede a la actividad haciendo clic en el centro del balancín.
En esta actividad deben colocar cosas en dos cestos, a modo de balanza de dos platos, para comparar pesos, e intentar equilibrarlos.
Actividad.
Primero se les ofrece todo lo que hay en el maletero del coche y deben repartirlo entre los dos cestos. Para facilitarles el trabajo nos va saliendo una indicación del peso que lleva cada cesta en cada momento.
Como en la vida real, se les permite un margen de error, y se equilibra de manera aproximada.
En la siguiente pantalla se les permite poner algunos objetos en la cesta y comparar pesos. Podría servir como actividad por parejas, en la que uno pone cosas en uno de los cestos y el compañero busca otras cosas que igualen la cantidad.
Se les proponen actividades de comparación de cantidades a partir de tres envases conocidos: el vaso, de ¼ de litro, el tetrabrik de 1 litro y las latas grandes, de ½ litro.
Deben llenar envases grandes (jarras, botellas) con los pequeños, agrupando medios y cuartos de litro.
En otra de las actividades se les propone llenar recipientes pequeños a partir de garrafas de 3, 5 y 8 litros.
En todas las actividades se les pide hacer una estimación del resultado, y luego la animación se encarga de comprobar lo que ocurre. De esta manera ven si se han pasado o se han quedado cortos.
Partimos de una introducción animada en la que se hace referencia a la medida del tiempo por observación del sol y de las estrellas des de la antigüedad. Y un banco de imágenes de diferentes instrumentos que se han ido usando en diferentes civilizaciones para medir el tiempo.
En este bloque de actividades hemos querido hacer actividades de medida real. No es una actividad a la que estén acostumbrados y requiere atención y concentración.
En la primera se les pide que señalen los relojes de arena, desde el que tarda menos al que tarda más tiempo en vaciarse.
En la segunda actividad aparece un reloj de arena y un cronómetro, y se trata de anotar cuantos segundos tarda la arena del reloj de caer. Ellos mismos se darán cuenta de la utilidad de buscar un punto de partida (el que hace de cero en la regla, al medir los centímetros). Se les permite un margen de error por exceso y por defecto.
En la tercera actividad el reloj de arena desaparece de su vista y otra vez se les pide el tiempo total que tarda en vaciarse.