Las personas sólo podemos tomar agua limpia para no enfermar, para ello el agua procedente de ríos y embalses se hace pasar por lugares llamados plantas potabilizadoras, en ellas el agua se filtra, se hace transparente, se airea y se desinfecta con cloro para eliminar los microbios, así se consigue agua potable adecuada para el consumo de las personas.

El agua no apta para el consumo humano, que contiene microbios, se dice que está contaminada. En la sociedad actual cada vez es mayor el número de ríos, lagos, aguas subterráneas y mares que se están contaminando debido a los vertidos de productos tóxicos procedentes de la industria, alcantarillados de ciudades y fertilizantes utilizados en la agricultura intensiva.