Los líderes de las principales potencias aliadas se reunieron periódicamente desde 1941 con dos objetivos fundamentales:
- Estudiar la táctica de las operaciones y el desarrollo militar del conflicto, con el fin de obtener la victoria.
- Preparar, con vistas al término de la contienda, un nuevo orden mundial asentado en una organización internacional basada en la seguridad colectiva (la Organización de las Naciones Unidas).
Se estaba diseñando una nueva estructura de relaciones internacionales, cuya vigencia se ha prolongado hasta comienzos de la década de los noventa del siglo XX.
La forma de lograr ese objetivo fue el sistema de conferencias, uno de los procedimientos diplomáticos más antiguos.
En un principio se reunieron los líderes de Estados Unidos y Gran Bretaña (conferencias bipartitas). Desde el año 1943, estas reuniones diplomáticas se abrieron a otras potencias, como la URSS o China (conferencias tripartitas). |