La crisis del Antiguo Régimen - La Guerra de la Independencia
Tras la firma de la paz con Francia en 1796, la política española se vinculó al expansionismo francés. La derrota de la flota hispano-francesa en Trafalgar (1804), confirmó el dominio inglés de los mares. Los franceses contraatacaron intentando invadir Portugal, tradicional aliada británica.
Tropas francesas, dirigidas por el general Junot y más tarde por Murat, penetraron en la Península con permiso del gobierno español. Pero la intención de Napoleón era, no sólo ocupar Portugal, sino instaurar en el trono de España a su hermano, aprovechando la crisis dinástica entre Carlos IV y su hijo Fernando (Motín de Aranjuez, marzo de 1808).
El pueblo de Madrid se levantó frente a los franceses el 2 de mayo de 1808, fecha que marca el inicio de la Guerra de la Independencia. España quedó dividida entre los que aceptaron la nueva monarquía de José I Bonaparte, y los que la rechazaron, reuniéndose en Juntas provinciales y, poco después, en una Junta Central. |