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La dominación europea del mundo. |
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| Potencias imperialistas - Otros imperios expansivos: Alemania y Bélgica |
Mientras algunas potencias, como Alemania o Bélgica se abrían paso en el mundo ampliando sus territorios, otras como España y Portugal comprobaban que su falta de potencial industrial dificultaba la explotación de sus colonias, que se veían amenazadas por las ansias expansionistas de los nuevos imperios.
 El
rey belga Leopoldo II fue un gran viajero y un activo hombre
de negocios que financió expediciones como la de Stanley a la
cuenca del Congo, con aparentes fines humanitarios pero sin
detenerse ante el uso de la fuerza, lo que permitió a un pequeño
país como Bélgica convertirse en una gran potencia colonial.
Ante el avance de los exploradores y conquistadores europeos en África, Bismarck convocó en 1885 un congreso en Berlín por el que obtuvo importantes posesiones, algunas enormemente estratégicas, como Tanganika, y además Togo, Camerún y el África Sudoccidental. Aparentemente favoreció las aspiraciones francesas, pero en realidad se pretendía que olvidaran la pérdida de Alsacia y Lorena y frenar la expansión inglesa. |
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