Ministerio de Educación, Política Social y Deporte
ESO, Educación Secundaria Obligatoria


La Europa feudal



FEUDALISMO


ORGANIZACIÓN SOCIAL


Nobleza o Guerreros


Clero


Pueblo o campesinos


ORGANIZACIÓN ECONÓMICA


Expansión agraria


Resurgir del comercio


La organización de los gremios


EL RESURGIR DE LAS CIUDADES


Razones


Funciones


Sociedad


2.

La Europa feudal

Organización económica - Resurgir del comercio

El incremento de la producción agraria permitió el aumento demográfico, que, a su vez, demandó más productos agrarios y otras muchas cosas que los hombres necesitaban para su vida. Los excedentes agrarios permitieron la recuperación paulatina del comercio.

El comercio se desarrollaba a distintas escalas, había un comercio a larga distancia y un comercio a corta distancia. Al desarrollo del comercio colaboraron la tranquilidad por ausencia de ataques de invasores y las cruzadas.

Los comerciantes y la vitalidad de la economía medieval

Imagen de un mercader (siglo XIV-XV). Fragmento de un manuscrito de la Biblioteca Nacional de Francia

Desde el siglo XII el comercio fue uno de los motores de la economía europea. Aparte del comercio local, se produjeron importantes intercambios de productos necesarios para el hombre medieval: la sal, precisa para la conservación de alimentos, se compraba de las minas alemanas o de las salinas de la costa atlántica, las especias del lejano Oriente, los vinos del Rhin, de Borgoña o de Burdeos, las pieles de Europa del Este, la lana de Inglaterra o España, los paños de Flandes e Italia. Los comerciantes más emprendedores se movieron por el Mediterráneo y el Báltico.


Mediterraneo: ciudades más importantes para el comercio y áreas de movilidad.
Los mercaderes especializados en el comercio a larga distancia fueron en principio los italianos, en especial venecianos y genoveses, que se dirigían con sus barcos al Este del Mediterráneo. Allí fundaron colonias desde las que comerciaban. Por esos puertos del Mediterráneo oriental llegaban a Europa productos exóticos, más o menos necesarios, como las especias o las sedas. Ese comercio fue muy activo hasta la llegada de los turcos otomanos al Este europeo a comienzos del siglo XV.



Báltico: ciudades de la Hansa
Otra área europea fue especialmente importante en el comercio: se trata de la zona del Báltico, en la que durante los siglos XIV y XV se desarrolló un grupo de ciudades que formaron una asociación denominada la Hansa (palabra alemana que se traduce por liga). Casi cien ciudades, entre las que se encontraba Lübeck, Hamburgo, Bremen o Danzig, formaban esa confederación. Operaba a gran escala, y sus barcos llevaban por el Báltico pescado, madera, cereales, pieles. Metales y ámbar hasta los mercados de Europa Occidental, y regresaban con paños, vino y especias.

El comercio a larga distancia proporcionaba enormes beneficios. Un buen ejemplo es una expedición portuguesa que iba a la Indias a comprar especias en 1521. Compraban el clavo a 2-3 ducados y lo vendían en Europa a 336 ducados. Se conoce el coste de la expedición que llegó a un total de 22.000 ducados; como las gananicas fueron de 150.000, les quedó un beneficio de 130.000 ducados, lo que indica un porcentaje de beneficios que alcanzó un 600 por ciento.