Orientaciones
Solucionario
Actividad 1. ¿Para qué una mesa redonda? (1 sesión)
La mesa redonda es una técnica de discusión grupal que se caracteriza por ser una charla más bien informal,
que se da entre tres y seis personas versadas sobre un tema de interés común, frente a una audiencia. Entre los/as participantes
de una mesa redonda no hay diferencias jerárquicas, todos/as se encuentran en la misma posición a la hora de aportar sus
opiniones y conocimientos. Además, los/as expertos/as y el público, también hay un/a moderador/a que orienta la discusión,
a través de preguntas y comentarios de síntesis.
Generalmente, al terminar la mesa redonda se desarrolla un foro-discusión en asamblea que permite ampliar
la información y clarificar los puntos que quedaron confusos.
La mesa redonda se utiliza para identificar y clarificar problemas o temas de controversia; presentar
a una audiencia el análisis de un objeto, un evento o una situación desde diferentes ángulos, identificar ventajas o desventajas
de un proceso, estimular el interés en un tema e identificar direcciones de la opinión sobre algo.
Una mesa redonda no admite discursos, sino intervenciones cortas, precisas sobre el tema, por lo que se
recomienda que dure entre 15 y 45 minutos.
Elementos
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Moderador/a: presenta a los/las participantes, introduce al tema, coordina la discusión y al final
hace una síntesis.
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Especialistas: deben ser personas versadas en el tema. Exponen las ideas que se comentan en la mesa
redonda. Deben tener capacidad para escuchar y argumentar.
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Relator/a: resume los temas presentados por los y las especialistas, así como las preguntas del público
y sus respuestas.
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Público: debe tener un conocimiento básico sobre el tema e interés en su profundización.
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Reglas: los/as participantes deberán respetar los turnos para hablar.
Procedimientos
El desarrollo de una mesa redonda implica:
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Una etapa de planificación, en la cual se identifica el tema; se formula el propósito y los objetivos;
se analizan y se seleccionan los participantes bajo criterios de conocimiento, experiencia e interés en el tema; se prevé
la modalidad de procedimiento, es decir, si la discusión es abierta o controlada mediante preguntas del/de la moderador/a
y se decide el tiempo de duración. Igualmente se prevén los materiales y ayudas requeridos.
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Una etapa de desarrollo, en la cual se delimita el tema, se preparan en forma de guía algunas preguntas
y se elaboran los materiales.
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Una etapa de ejecución, en la cual se conduce la mesa redonda. Generalmente, la audiencia escucha, hace
anotaciones y ofrece sus planteamientos en el foro.
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Una etapa de evaluación, en la cual se valora la estrategia, su pertinencia para el tema y sus resultados
en concordancia con sus propósitos y objetivos.
Ventajas
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El conocimiento de diferentes puntos de vista y opiniones sobre un tema enriquece más que uno solo.
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Permite exponer a una audiencia diferentes puntos de vista sobre un tema como punto de partida para
su profundización.
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La atmósfera de informalidad que generalmente tienen las mesas redondas estimula el interés por un tema.
Limitaciones
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El/la moderador/a debe tener dotes de coordinador/a y debe ser capaz de orientar académicamente la discusión.
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No siempre es fácil encontrar las personas requeridas para el manejo de un tema y particularmente para
el logro de objetivos previstos.
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El papel pasivo de la audiencia puede conducir a un desinterés de sus miembros.
Recomendaciones
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Intentar que la estrategia se acomode al tratamiento del tema y sea adecuada para el logro de los objetivos
previstos.
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Seleccionar en forma adecuada el/la moderador/a.
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Preparar a la audiencia de antemano para que tenga el nivel de entrada requerido para el tratamiento
del tema.
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Conducir en forma adecuada el foro para lograr incorporar el resultado de la mesa redonda a la temática
general que se desarrolla en el curso.
