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MEDIEVAL |
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2. Piratas |
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A partir del siglo XI hubo un nuevo impulso de la piratería, provocado en parte por los problemas bizantinos tras los ataques de los turcos seljúcidas por el Este y de los normandos por el Oeste. La debilidad bizantina impidió a este imperio frenar los ataques de los piratas que asolaban sus costas.
A partir del siglo XII, con la recuperación del comercio con Oriente en la época de las cruzadas, el auge de las repúblicas italianas se vio acompañado del incremento de la piratería.
En los últimos siglos de la Edad Media el Mediterráneo sufrió además la presencia de los corsarios. El corsario era en principio diferente del pirata. El corsario estaba protegido por su nación de procedencia, en tanto que el pirata estaba condenado por todos. Bien es verdad que a veces no se distingue la actividad de unos y de otros. Los corsarios eran mercaderes que no se contentaban con comerciar, sino que además asaltaban y saqueaban, en última instancia robaban.
Los corsarios procedían de todos los pueblos en torno al Mediterráneo, de manera que genoveses y pisanos primero, y luego catalanes y valencianos fueron importantes en el corso mediterráneo. Uno de los ataques peores que presenciaría el faro de Alejandría tuvo lugar en su propia ciudad, atacada por los catalanes en 1414, que realizaron un pillaje general. La reacción del sultán de impedir el comercio con Cataluña, sería seguida de una postura por parte de los poderes catalanes de atacar las costas de Siria y Egipto. Esos ataques eran apoyados, pues, por las autoridades, bien fuera el rey, bien el poder municipal que es consciente de los ingresos que le puede proporcionar el corso.
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