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Los productos americanos |
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2. Capacidades productivas del suelo americano |
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"El potencial agrícola de La Española" |
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Digo que
los indios que al presente hay son pocos, y los cristianos no son
tantos cuantos deberían haber, por causa de muchos de los que en aquella
isla se han pasado a las otras islas y Tierra Firme; porque, además
de ser los hombres amigos de novedades, los que a aquellas partes
van, por la mayor parte son mancebos, y no obligados por matrimonio
a residir en parte alguna; y porque como se han descubierto y descubren
cada día otras tierras nuevas, parésceles que en las otras hincharán
más aún la bolsa; y aunque así haya acaecido a algunos, los más se
han engañado, en especial los que ya tenían casas y asientos en esta
isla; porque sinduda yo creo, conformándose con el parecer de muchos,
que si un príncipe no tuviese más señorío de aquesta isla sola, en
breve tiempo sería tal, que ni le haría ventaja Sicilia ni Inglaterra,
ni al presente hay de qué pueda tener envidia a ninguna de las que
es dicho; antes lo que en la isla Española sobra podría hacer ricas
a muchas provincias y reinos; porque, además de haber más ricas minas
y de mejor oro que hasta hoy en parte del mundo en tanta cantidad
se halla ni descubierto, allí hay tanto algodón producido de la natura,
que si se diese a lo labrar y curar de ello, más y mejor que en parte
del mundo se haría.
Allí hay tanta castañífola y tan excelente, que
ya se trae a España en mucha cantidad, y desde ella se lleva y reparte
por muchas partes del mundo; y vase aumentando tanto, que es cosa
de admiración.
En aquella isla hay muchos y muy ricos ingenios de
azúcar, la cual es muy perfecta y buena, y tanta, que las naos vienen
cargadas de ella cada un año. Allí todas las cosas que se siembran
y cultivan de las que hay en España, se hacen muy mejor y en más cantidad
que en parte de nuestra Europa; y aquellas se dejan de hacer y multiplicar,
de las cuales los hombres se descuidan o no curan, porque quieren
el tiempo que las han de esperar para le ocupar en otras ganancias
y cosas que más presto hinchan la medida de los codiciosos, que no
han gana de perseverar en aquellas partes. De esta causa no se dan
a hacer pan ni a poner viñas, porque en aquel tiempo que estas cosas
tardaran en dar fruto, las hallan en buenos precios y se las llevan
las naos desde España; y labrando minas, o ejercitándose en la mercadería,
o en pesquerías de perlas, o en otros ejercicios, como he dicho, más
presto allegan hacienda de lo que la juntarían por la vía del sembrar
el pan o poner viñas; cuanto más que ya algunos, en especial quien
piensa perseverar en la tierra, se dan a ponerlas. |
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